25 enero, 2022
En el mundo globalizado en el que vivimos, las estrategias de internacionalización de las empresas son fundamentales para su supervivencia, evolución y crecimiento en el mercado. Así, resulta evidente la necesidad de salir del territorio nacional en busca de nuevos clientes en el extranjero, pero, ¿hacia dónde me dirijo?
Por supuesto, esta pregunta debe responderse teniendo en cuenta las características de mi producto, pero una apuesta segura será introducirse en aquellos países con tasas económicas favorables y una gran capacidad de negocio. Entre estos países, cabe destacar la potencia emergente de moda, el gran gigante asiático: China.
El mercado chino es inmenso y posee grandes perspectivas de desarrollo. En la actualidad, gracias al auge de la clase media y la demanda creciente, es el mayor mercado de consumo del mundo y va a la vanguardia de las últimas tendencias en e-commerce. Adicionalmente, su creciente influencia geopolítica es perfecta para España, pues Pekín y Madrid mantienen buenas relaciones bilaterales.
Entre la multitud de posibilidades a explotar que ofrece China, destaca el sector agroalimentario. La población china es conocedora de la excelente calidad del producto español, por ello entre las partidas más importantes de exportación de España a China en los últimos años encontramos el aceite de oliva y el vino, entre otros.
Asimismo, China es el primer mercado mundial de e-commerce, en 10 años ha pasado de representar el 1% del e-commerce global al 43%. Este desarrollo vertiginoso se debe a la aparición de las empresas líderes en e-commerce del país. El e-commerce es el intercambio de bienes o servicios a través de internet o, en otras palabras, un universo de tiendas online con un potencial incalculable.
¿Por qué nos interesa el e-commerce chino?
De todo lo que ofrece el e-commerce, las plataformas B2B (busines to business) son una apuesta segura en el sector agroalimentario para las exportaciones de productos españoles al país chino. Gracias a ellas, se crea un canal de venta por el cual la empresa española puede vender sus productos a otras empresas del mercado de destino, las cuales posteriormente venderán al consumidor final.
Practicar e-commerce mediante plataformas B2B permite la exposición de tus productos agroalimentarios durante las 24 horas del día, los 365 días del año de forma barata y con una exposición que alcanza millones de usuarios.
Y os preguntaréis, ¿cómo nos internacionalizamos?
Dentro del sector agroalimentario, es preciso señalar dos de sus principales plataformas B2B: ImportFood (进口食品网) y Pútáojiǔwǎng (葡萄酒网).
La primera de las plataformas B2B agroalimentaria, ImportFood, permite gestionar todo tipo de productos agroalimentarios, desde galletas y dulces, pasando por la miel, los frutos secos y las legumbres, así como leche y queso y vinos y aceites, entre muchos otros.
Por otro lado, Pútáojiǔwǎng es una plataforma B2B dentro del sector agroalimentario exclusiva para bebidas alcohólicas, especialmente para vinos, pero que también permite la comercialización de cerveza o aguardiente, por ejemplo.
El funcionamiento de ambas plataformas B2B es simple:
- abrimos una cuenta de usuario e iniciamos sesión;
- subimos los productos agroalimentarios a la plataforma, indicando todos los datos del mismo, los ingredientes y cualquier información de interés;
- Contestamos los mensajes de los potenciales clientes interesados en nuestros productos agroalimentarios;
- ¡VENDEMOS!
Por último, pero, de hecho, lo más importante a la hora de exportar a China es dedicación y ganas. Hay que escuchar al cliente, conocer sus necesidades y dar un servicio de calidad a buen precio, poniendo en valor el producto español y creando lazos comerciales fuertes y estables.
Resumiendo, las empresas deben barajar la idea de internacionalizarse de forma online a través de este tipo de plataformas B2B de e-commerce y diversificar su producto agroalimentario en un mercado tan inmenso y emocionante como el chino, que ya se está configurando como una de las grandes potencias comerciales en el mundo globalizado actual.